Edwin Van der Sar, leyenda bajo palos, se retira.

Se retira un portero legendario. Edwin nos dice adiós después de más de dos décadas de carrera profesional. Joven, espigado, rubito y tembloroso debutó en el Ajax de Amsterdam en 1990. Se fue ganando el respeto de todos. Casi 10 años se mantuvo en Holanda siendo un seguro bajo palos. Jugador alto y de grandes reflejos, con buenas salidas por alto. Su mejor faceta, la de para-penaltis. Nunca en toda su carrera perdió una tanda desde los 11 metros.

Con el Ajax se hizo grande, ganando entre otras cosas, una Champions y una UEFA. 4 ligas y 3 copas de Holanda le hicieron volar al Calcio. La Juventus de Turín le recibió con los brazos abiertos. Corta fue allí su carrera, pues el multimillonario fichaje de Buffón por los italianos le cortó las alas y le hizo coger rumbo a la Premier. Fulham fue su destino. Un equipo de la parte media-baja de la tabla que no iba muy acorde con el portero holandés. 4 años pasó en la ciudad de Londres hasta que Ferguson se fijó en él. Van der Sar ya era mayor. 35 años concretamente. Pero el entrenador del Manchester le fichó sin dudar. Ahora sí, Edwin volvía a la élite. Disputar champions todos los años y luchar por ligas, 4 en su palmarés. Con una edad con la que podía pensar en la retirada y la jubilación, el holandés tenía hambre de títulos y de victorias.
En Manchester ha pasado sus mejores y peores momentos. Los mejores, como siempre, son las victorias, pero también tuvo que ausentarse más de media temporada por problemas familiares, de su mujer concretamente. Ahora, ya entrado en los cuarenta años, es el momento de pensar en la retirada y en un futuro tranquilo. Ferguson le quería renovar, pero el holandés no da para más. Probablemente forme parte del cuerpo técnico del United o del Ajax como preparador de porteros. Quien mejor que él si no.

Se retira un portero de leyenda, un portero muy grande, más aún que los casi 2 metros de altura que le contemplan. Mucha suerte Edwin.